El desván de las melodías: Racing in the Street

En algún momento de nuestras vidas todos soñamos con tener un Chevrolet. Aunque algunos no supiéramos cómo lucía (y sigamos sin saberlo), lo imaginábamos brillante. Y clásico. Fabricado con ese material del que están hechas las cosas creadas para perdurar en el tiempo. Lo imaginábamos corriendo calle arriba rumbo a ese lugar en el que sueños se cumplen y la tan ansiada libertad se hace realidad. Lo imaginábamos en una película de finales de los cincuenta con las guitarras de Chuck Berry y Gene Vincent saliendo disparadas del salpicadero. No, nadie volvía a casa después de la guerra con un Chevy y una maleta llena de historias.

Sin embargo, ese billete sin retorno a veces se convertía en una carga demasiado pesada. Una carretera de un sólo sentido a la que cantaba Springsteen en aquel mítico Born To Run. El éxito le llegó al de New Jersey, no sin antes avisar en dos discos que rendían tributo a una ciudad de segunda, a unas calles sin glamour ni grandes autopistas. ¿Y ahora qué? Lo difícil no es llegar a ese sitio, lo difícil es volver. Recorrer el camino de vuelta a un lugar que ya no te reconoce. ¿Dónde están los viejos chicos de la pandilla? ¿Sigue abierto aquel bar en el que crecimos y fuimos felices?

Entonces te refugias en aquel rincón oscuro, debajo de aquella estación, al final de la ciudad. Allí donde nadie te reconoce y no te pueden preguntar ese ¿qué tal te va la vida? Lo difícil no es cumplir tus sueños. Lo difícil es contarlo. Recordar aquellos años en los que subíamos a nuestras chicas en el asiento del copiloto y pisábamos el acelerador a fondo. Sin miedo a llegar tarde al trabajo, a quedarnos dormidos en la reunión con el jefe de turno. Todos querríamos vivir eternamente en aquella última noche de instituto, como en American Graffitti. Fantaseando sobre nuestro futuro, dando el primer beso, haciendo carreras en la frontera que separa nuestra infancia de lo desconocido.

Decía Springsteen que cuando entró a grabar Darkness on the edge of town quiso contar una historia diferente, alejada de la estrella que la prensa le había puesto sobre la cabeza. Regresar a esa New Jersey que se filtraba en los versos de Greetings y The Wild, aunque con la experiencia de aquel que ha visto las luces de la gran ciudad. Volver a sentir el polvo en cara, cantar con los amigos hasta altas horas de la madrugada. La apuesta le costó tres años y más de un disgusto. Tres años para recordar a aquel padre que se dejaba la piel en la fábrica y a aquel amor adolescente que espera, sentada en el porche, a que vuelvas de una de tus noches de juerga. No, todo eso se ha ido. Sólo quedan las canciones para recordarnos que un día fuimos jóvenes. Y libres.

I got a sixty-nine Chevy with a 396 
Fuelie heads and a Hurst on the floor 
She's waiting tonight down in the parking lot 
Outside the Seven-Eleven store 
Me and my partner Sonny built her straight out of scratch 
And he rides with me from town to town 
We only run for the money got no strings attached 
We shut `em up and then we shut `em down 

Tonight tonight the strip's just right 
I wanna blow `em off in my first heat 
Summer's here and the time is right 
We're goin' racin' in the street 

We take all the action we can meet 
And we cover all the northeast state 
When the strip shuts down we run `em in the street 
From the fire roads to the interstate 
Some guys they just give up living 
And start dying little by little piece by piece 
Some guys come home from work and wash up 
Then go racin' in the street 

Tonight tonight the strip's just right 
I wanna blow `em all out of their seats 
Calling out around the world 
We're going racin' in the street 

I met her on the strip three years ago 
In a Camaro with this dude from L.A. 
I blew that Camaro off my back and drove that little girl away 
But now there's wrinkles around my baby's eyes 
And she cries herself to sleep at night 
When I come home the house is dark 
She sighs "Baby did you make it all right" 
She sits on the porch of her daddy's house 
But all her pretty dreams are torn 
She stares off alone into the night 

With the eyes of one who hates for just being born 
For all the shut-down strangers and hot rod angels 
Rumbling through this promised land 
Tonight my baby and me we're gonna ride to the sea 
And wash these sins off our hands 
Tonight tonight the highway's bright 
Out of our way mister you best keep 
`Cause summer's here and the time is right 
We're goin' racin' in the street

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